La madrastra de la protagonista se quedó en su apartamento por unos días y, sin que su padre lo supiera, ella y su madrastra tuvieron un encuentro íntimo.
La colegiala creó un cuarto de seducción y misterio en el apartamento, provocando la anticipación de momentos íntimos con su compañero.
La madre de su amiga, con su magnetismo irresistible, conquistaba al amigo en el escenario íntimo del apartamento.