La estrecha escalera del apartamento hizo que el chico y la chica se rozaran accidentalmente mientras subían juntos.
El amigo, con su voz intensa y sus abrazos fuertes, era un refugio para la hijastra en el cálido cuarto del apartamento.
El amigo, con su magnetismo tentador y gestos llenos de pasión, encendía la llama de la atracción en el aire íntimo del apartamento.
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